lunes, 8 de junio de 2015

LA HISTORIA DE LA COLONIZACIÓN DE GUINEA Y LA NOVELA: TIERRA NEGRA de DOMINGO MANFREDI CANO y LAS PUERTAS DEL PARAISO de FRANCISCO PASCUAL DE LA PARTE.

PASCUAL DE LA PARTE, Francisco: Las puertas del paraíso (Leipzig 2011?. Lulu.438 páginas).
MANFREDI CANO, Domingo: Tierra negra (Barcelona 1957. Luis de Caralt editor. 281 páginas).


   Domingo Manfredi (Aznalcázar, Sevilla, 1918- Alicante 1998) fue un periodista y escritor de tendencia falangista. Muy prolífico en la escritura y autor de algunas novelas premiadas. También fue traduictor. Trabajó en radio nacional y Televisión Española. Mostró cierta inclinación a escribir sobre el África Española, llegando a ganar el premio África en 1950 con el libro Ischulla (1950), una especie de relato poético sobre costumbres bubis. Era un premio que se otorgaba, como era natural en la época, a escritores muy próximos al régimen.

   En 1957 publicó la novela Tierra Negra ambientada en Fernando Poo. Es un escritor que escribe bien aunque sin la genialidad o la capacidad de renovación como para ser una primera figura, era un escritor acostumbrado a escribir a diario y con facilidad para crear historias dentro de un realismo que trata de romper al hablar de Guinea. De mentalidad tradicional, se sitúa en la línea de Tomás Borrás, Francisco Camba o Tomás Salvador a los que también les atrajo el colonialismo africano. En Tierra negra compone un tríptico histórico en tres momentos: 1788, 1888 y 1945. Como hilo conductor usa tres generaciones de un bubi singular, Riebetta, que había tomado de una leyenda que ya recogió en Ischulla. Con ello trata de mostrar el contacto entre bubis y españoles, la relación pacífica y bienintencionada, y el triunfo de la religión católica entre los africanos. Es decir, todo en la línea de colonialismo paternalista y católico en la que militaba sinceramente el autor.

   En algunos pasajes de la novela se ve que el autor no ha vivido lo suficiente en Guinea, que sólo la conoce de visita. Pero el relato muestra una línea ingenua de colonialismo y una mentalidad idealizadora del mismo.
Domingo Manfredi

   Las editoriales de autoedición que proliferan actualmente han hecho posible la publicación de muchas novelas que las editoriales comerciales rechazan, muchas veces por motivos económicos y no de calidad. Pero estas editoriales plantean dudas sobre la fecha de la edición (ya que se imprimen a demanda) e, incluso, del lugar de la misma.
   Francisco Pascual de la Parte es un diplomático con mucha experiencia, que ha estado destinado en lugares conflictivos y en lugares tranquilos, aficionado a la escritura es autor de varias novelas. Algunos datos profesionales los vemos en: http://www.xn--cartadeespaa-khb.es/index.php?seccion=1&reportaje=177
Francisco Pascual
   Como tantos otros diplomáticos, sus relatos tienen mucha relación con los países en los que estuvo destinado. Es lógico si pensamos que son lugares que conoce bien, que pueden resultare interesantes para un lector no familiarizados con ellos y que pueden tener la originalidad de un argumento distinto para el español. El autor de esta novela estuvo destinado en Guinea Ecuatorial en 1980. Y sobre este país, sobre su historia colonial, trata Las puertas del paraíso que viene precedida por un excelente resumen histórico de los hechos acontecidos antes de la ficción y se acompaña de un apéndice en el que resumen también magistralmente lo que sucedió desde que finaliza la narración hasta la actualidad. Porque la novela es una novela-río que discurre durante años, por generaciones. Pero, a diferencia de Manfredi que observa la historia con mentalidad colonial, Pascual de la Parte se distancia de la ideología colonialista y trata de ser objetivo en la narración. No es una novela de propaganda (sin menospreciar los méritos literario de algunas de esas novelas), sino un relato histórico enmarcado en Guinea.

   El primer acto se desarrolla en la expedición que el marino Manterola, el padre Usera y el cónsul Guillemard de Aragón realizan a Fernando Poo en 1845. Detrás del trasfondo histórico como hilo conductor, y como es lógico en una novela, hay una ficción familiar que le da cohesión al relato y trata de que el lector se enganche en la acción. En las páginas de la novela van apareciendo personajes históricos como el gobernador Beecroft, Lynslager, el rey Moka, y personajes de ficción para que el autor haga una elogiable reconstrucción de lo que pudo haber sido la vida colonial. Y acaba en Annobón. Pascual de la Parte está muy bien documentado sobra la historia de Guinea y conoce el paisaje a la perfección pero hay muy pocas fuentes sobre la vida doméstica y cotidiana de esa época en ese lugar. Y hace un ensayo de reproducción de la vida en la ciudad de Clarence-Santa Isabel. Su doble objetivo: narración histórica-historia de ficción se mezcla con una doble historia: La trama principal de búsqueda del abuelo y la secundaria de amor del protagonista, o viceversa. Y en esa complicación estriba la pérdida de ritmo, el dedicar mucho espacio a lo accesorio y poco a las acciones más relevantes. Tal vez por eso mismo resulte un libro con muchas páginas.
   Después hace un recorrido temporal que le lleva a concluir la novela en la Guerra Civil y en el golpe de Teodoro Obiang. En estos últimos capítulo, la tercera parte final del libro, el autor quiere hacer un recorrido histórico novela aunque pierde una parte de la coherencia del relato inicial. Para él, la historia colonial de Guinea es el reflejo de los fracasos españoles: … era la situación por la que atravesaba España la causa principal de que no se pusiera en marcha un plan metódico para sentar las bases de la prosperidad de la colonia. Los esfuerzos de la metrópoli eran encomiables pero discontinuos. El interés español por Guinea se manifestaba a ráfagas y los criterios para su administración quedaban a merced del Gobierno de turno. En resumen: Guinea no funcionaba porque no funcionaba España (página 304).

   Dos novelas que, desde perspectivas ideológicas distintas, tratan de investigar en la historia colonial de Guinea Ecuatorial en diversas etapas históricas.

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